Te invitamos a conocer algunos de los hitos que han marcado este camino y nuestro propósito de impulsar a comunidades educativas para que colaboren, se desarrollen continuamente y disfruten de la docencia, junto con contribuir, a partir de nuestra experiencia, a pensar la educación del futuro.
2014. Todo comienza en la sala de clases donde Catalina, Florencia, Bernardita y Raimundo se dan cuenta de la necesidad de facilitar técnicas concretas a docentes para el manejo de aula, con el fin de crear ambientes de aprendizaje sólidos y efectivos. Nace así Impulso Docente.
2015. Nos constituimos como fundación y buscamos buenas prácticas nacionales e internacionales que pudiesen ser traducidas en cursos de perfeccionamiento docente efectivos en el contexto chileno. Diseñamos e implementamos el primer curso de Ambiente en Sala.
2016. Creamos una biblioteca virtual de docentes chilenos ejecutando buenas prácticas, grabando más de 100 horas de clase. Desarrollamos el Curso de Observación y Retroalimentación.
2017. Ingresamos al registro ATE (Mineduc). Diseñamos el nuevo curso Clases Desafiantes y se extiende nuestro programa de Asesoría en Desarrollo Profesional Docente en 13 establecimientos en 5 regiones de Chile.
2018. Se consolida nuestro modelo de Asesoría en Desarrollo Profesional Docente apoyando a equipos directivos en la implementación de un sistema de visitas al aula en Punta Arenas, Linares, Quillota, Recoleta, San Joaquín y La Pintana.
2019. Buscamos escalar nuestros programas sin perder la personalización. Decidimos, con el apoyo de Fundación Colunga, traducir nuestra experiencia en formación de mentores en un curso semipresencial, certificado por el CPEIP y escalable a todo Chile. Junto con eso, somos representantes para Latinoamérica de Sibme, plataforma de acompañamiento a distancia. Además, alineamos nuestros programas a la política pública, abriéndonos a desarrollar otras estrategias de Desarrollo Profesional Docente, como rondas instruccionales y club de video. Colaboramos codo a codo con fundaciones como Primero Lee y FCMPC en la implementación de cursos de perfeccionamiento y asesoría en diversos establecimientos.
2020. Un año de desafíos para nuestro país y el mundo. Junto con lanzar nuestros programas de Aprendizaje Socioemocional, nos adaptamos rápidamente a este nuevo escenario mediante la virtualización de nuestros programas. Y para seguir impulsando a docentes en tiempos de cuarentena, lanzamos un Portal de Educación a Distancia.
2021. En este segundo año escolar en pandemia, consolidamos y extendimos nuestros programas a más de 50 colegios y jardines infantiles de casi todas las regiones del país, impactando a cerca de 2.400 docentes y educadoras de párvulos que forman a más de 39.000 niños, niñas y adolescentes. Incorporamos Educación Parvularia como eje central, con programas adaptados a las particularidades del primer educativo. Gracias a las fundaciones Colunga y Liguria, formamos a 133 nuevos mentores y mentoras, 21 educadoras de párvulos. En 3 años, 300 docentes se han especializado a través de nuestro Diplomado en Mentoría y Acompañamiento.
2022. Este año seguimos firmes en nuestro propósito de contribuir con escuelas y jardines infantiles de todo el país, a través de un trabajo colaborativo con otras tantas organizaciones comprometidas con la educación. En estos tiempos difíciles, nuestro foco y preocupación principal es aportar al bienestar de las comunidades educativas, partiendo por los adultos, que sabemos están altamente exigidos, y al desarrollo profesional de nuestros docentes y educadoras de párvulos con mucha colaboración y trabajo en equipo.
Agradecemos especialmente a nuestros colaboradores que han contribuido a que todo esto sea posible: Fundación Mustakis, Fundación Colunga, Fundación Irarrázaval, Fundación Liguria, Fundación Teraike, Fundación Larraín Vial y Fundación Olivo.